Padre Roberto Polain Cartier
Nació en Lieja, Bélgica, el 27 de abril de 1915. Sus padres fueron don Maurice Polain y doña Marie Cartier. Entre un hermano tres años mayor, Maurice, y Madelaine, la menor, Roberto, que regaloneaba mucho a su pequeña hermana, creció en una familia muy unida, dirigida por un padre médico, especialista en Radiología, y una madre siempre dedicada a las labores del hogar, velando con un celoso cuidado por la felicidad de todos.
Después de la escuela primaria, Roberto cursó sus seis años de humanidades Grecolatinas en el colegio Saint Servais de Lieja, dirigido por Jesuitas. Atraído por el Scoutismo, se adhirió rápidamente al movimiento, encontrando la mejor manera de ocupar sus horas libres ayudando. Le gustaba mucho ocuparse de los jóvenes y reunirlos. En este medio destacó, llegando a ser Jefe de Patrulla y luego Jefe de Distrito. Tomó en sus manos la organización de las reuniones, excursiones y campamentos.
Probablemente gracias al Scoutismo llegó a ser un alumno aventajado. Su padre a veces le amenazaba con privarlo de sus reuniones cuando los resultados escolares se debilitaban. Con la amenaza bastaba.
Desde joven, la pesca era su deporte favorito. Acompañado de su papá, partían el domingo al alba para no volver hasta la tarde, después de haber trajinado las riberas de los ríos en los alrededores.
Cuando terminó sus humanidades, quiso seguir su deseo de ayudar a los demás siendo sacerdote. Su padre no hizo ninguna objeción, pero con la condición de tener un año para reflexionar sobre su elección, ingresando a la Universidad de Lieja. Al año siguiente entró al Seminario, interrumpiendo sus estudios por el servicio militar.
Estando en éste, se enfermó de pulmonía. Volvió al Seminario, desde donde lo enviaron varios meses a la montaña, en Francia, en la región de Gap, para su recuperación. Terminados sus estudios, fue ordenado sacerdote. Celebra su primera Misa el 13 de julio de 1941, en Lieja. Lo nombraron Capellán Scout de una tropa muy importante en la ciudad y luego Capellán Federal.
La terrible guerra que asoló a Europa entre 1939 y 1945, la Segunda Guerra Mundial, no lo dejó inactivo, ocupándose con abnegación, como integrante de la Resistencia Belga, de socorrer a los heridos, ocultando a los soldados que pudieran arrancar de las garras del enemigo.
Con jóvenes profesores creó en Marchin una casa de refugio para los hijos de los militares muertos, desaparecidos o que permanecían prisioneros. Basada en los principios Scout, esta casa se agrandó rápidamente y llegó a ser un gran colegio. Al principio se llamó Prince Baudouin. Hoy se llama L'Athénée Royal Prince Baudouin y está actualmente en manos del estado. Da clases en la Universidad de Lieja en 1945. Marchando bien el colegio, Roberto juzgó que su presencia ya no era más necesaria y, como él aspiraba todavía a ser útil, decidió acompañar “por dos años” a un grupo de familias belgas decididas a instalarse en el sur de Chile, en Chile Chico, y que buscaban un Capellán.
El viaje se concreta a partir del 15 de octubre de 1948, llegando a Arica el 13 de diciembre, para proseguir camino hacia Punta Arenas, donde llegan el 4 de enero de 1949. Una vez llegados allí, deciden esperar algunas semanas antes de dirigirse a Chile Chico. Participan en la celebración del Centenario de la Fundación de esta ciudad. El 7 de febrero se inicia el viaje a través de la Patagonia argentina. El 15 de febrero llegan a Chile Chico. Allí creó un colegio para atender las necesidades de los hijos de los colonos belgas, el cual existe hasta hoy.
Tras su experiencia de dos años en Chile Chico, se traslada a Santiago y da clases en el Instituto de Humanidades Luis Campino. Allí funda la tropa Scout, la cual con el pasar del tiempo toma su nombre. Estando aquí, el párroco de la Anunciación, don Joaquín Aguiar, le propone la idea de llevar adelante el proyecto parroquial de fundar un colegio.
Así surge el Colegio Notre Dame en el año 1952, en una casona que recuerda su “Château de Fourneau”, en Marchin, donde funcionaba el Prince Baudouin, elegida en conjunto con los chiquillos del grupo parroquial.
El comité económico de la parroquia da el pase a la compra y en 1952 se inician las clases con dos cursos. El colegio crece y el Scoutismo Católico también. En 1956, junto a un importante grupo de educadores, funda la Federación de Scouts Católicos de Chile. Se integra a la Universidad Católica de Chile como profesor de la Cátedra de Psicopedagogía y Literatura Francesa, la cual sirve por más de 20 años.
Durante el gobierno del Presidente Eduardo Frei Montalva, se le otorga la Condecoración a la Orden al Mérito Bernardo O'Higgins, por los servicios prestados a la educación chilena. En noviembre de 1977, publica su libro "Educar para la Libertad". A comienzos de 1978 recibe la visita de su hermana Madelaine y su cuñado Jean. Comparten con los profesores y viajan posteriormente al Rancho del Maule y a otras zonas del sur chileno. De hecho, Roberto viajaba todos los años a Bélgica, a visitar a los suyos. Partía a comienzos de julio y volvía a comienzos de septiembre.
En julio de 1978 viaja por última vez a su patria. Tal vez, presintiendo su muerte, se despide de todos sus amigos y familiares y regresa, aun desechando la posibilidad de estar y celebrar el matrimonio de uno de sus sobrinos regalones, como de costumbre, a comienzos de septiembre. Su corazón, que ya a comienzos de año había tenido un primer infarto del cual aparentemente se había recuperado, en la noche del 12 de septiembre de 1978, falla definitivamente.
Muere en su pieza de su Colegio Notre Dame.
"Como primer rector, creí muy importante
ser también profesor jefe, ya que mi papel principal se realiza en las reuniones semanales que tenemos con los demás profesores
jefes; en estas reuniones, en un ambiente de amistad que se prolonga habitualmente con el almuerzo, se pasa revista a los problemas que se presentan en cada curso y se busca en
conjunto su solución."
Padre Roberto Polain Cartier
Educar para la Libertad