La Aventura Scout de Juan: extractos de su bitácora
1. Lobatos
2. Rangers
3. Tropa Notre Dame des Bois
4. Tropa Notre Dame de la Montagne
5. Ardillas
En la presentación de esta vivencia, tan importante como es el scoutismo, hemos querido presentar la historia de un chiquillo, Juan, para que, recordando, reflexione y nos comente su camino desde lobato (4º Básico) hasta que sale de Ardilla (IVº Medio).
Esta historia, escrita por decenas de niños y adolescentes de las unidades lobato y scout, es la historia de tantos chiquillos en fogones y campamentos. Esperamos que esta bitácora nos haga viajar, descubrir y conocer más de esta pedagogía que es el scoutismo. ("Relato publicado en la Revista de los 40 años, 1992").
24 de marzo
En este cuaderno que le pedí a mi mamá (me sobró y no sé a qué asignatura corresponde) voy a escribir lo que me parezca importante de lo que me pase. Así, cada vez que tenga algo que contar, voy a escribir.
25 de marzo
Escuché a algunos compañeros de cuarto básico conversar en la "liebre" acerca de que iban a ser lobatos.
¿Qué será eso?
Pregunté a la tía si los de Tercero Básico también seríamos lobatos, y me dijo que no, que hasta el próximo año. Voy a estar atento, así, cuando llegue a cuarto ya sabré qué es ser lobato y qué hacen.
7 de abril
Hoy en la mañana, al llegar, vi a los de cuarto con Camisa gris y unos Pañolines. Les pregunté por qué estaban vestidos así y me dijeron que esa era su ropa de lobatos, que ese día tenían su primera comunión.
4 de mayo
Parece que ser scout es entretenido, hacen juegos y conversan en las reuniones. También van a hacer un paseo.
14 de junio
Mi amigo Pedro me explicó que los lobatos no son lo mismo que los scout y que tienen que hacer una promesa y vivir los valores del Colegio.
También me dijo que van a dormir en el Colegio, ¡qué susto! Que bueno que a mí me toca el próximo año.
3 de julio
Ahora sé que los scout hacen fogatas y cantan canciones del Colegio, cocinan y duermen en carpa.
Yo también dormí en carpa con mi papá cuando fuimos al sur en el verano.
Los scouts cocinan su comida; me gustaría aprender a cocinar y a hacer otras cosas.
9 de julio
¡Por fin a vacaciones de Invierno! Voy a escribir lo que me pase en las vacaciones en el campo de mis tíos.
4 de agosto
Con el apuro de irme se me olvidó llevar mi cuaderno y mis lápices, así que no pude escribir nada.
Pero, igual me estoy preparando para cuando sea scout. Hice varias investigaciones acerca de la naturaleza, los insectos y las hojas de los árboles.
26 de septiembre
En las vacaciones de Fiestas Patrias lo pasé superbién, fui a la playa con mis primos y jugamos harto.
Supe que todos los scouts del Colegio se juntaron en un campamento con carpas, hicieron fogones, bailaron, cantaron y comieron en cocina con leña y caminaron harto e hicieron otras actividades al aire libre.
Yo creo que me gustaría ir a un campamento, pero son tantos días sin mi familia, que se me quitan las ganas.
16 de octubre
Lo pasé superbién en la Kermesse del Colegio, comí harto y estuve en la "mansión siniestra" y jugué varios juegos y gané un premio en la "pesca milagrosa".
Lo más entretenido es que en todos los puestos de juegos había scouts y ellos dirigían los juegos y todo. Mi amigo Pedro me dejó jugar una vez gratis, pero no gané nada, es que era superdifícil botar los tarros con la pelota.
25 de noviembre
Los lobatos y los scouts bailan y juegan, viven los valores del Colegio al aire libre y tratan siempre de decir la verdad. Es entretenido y lindo, se aprenden muchas cosas, se pasa por peligros y se defienden por sí solos.
Duermen en carpa y viven experiencias muy buenas y se hacen más amigos.
...¡El próximo año yo quiero ser lobato también!
LOBATOS
Miércoles 15 de marzo
Hoy, en el Colegio, Javier le preguntó a nuestro profesor que cuándo iban a comenzar "los lobatos". El profesor dijo que había pensado hablarnos de ello el próximo viernes, pero que aprovecharía la oportunidad de la pregunta y nos contaría qué eran los lobatos y cuándo empezarían. El curso de puso contento y llovían las preguntas. El profesor nos hizo callar y nos dijo que preguntáramos en orden, que el viernes llevaríamos a la casa una carta explicándoles a los papás y que si nosotros queríamos y los papás también, enviaran firmada la ficha de inscripción. Nos dijo que además, para ser aceptados, los papás tenían que venir a reunión con los encargados de los lobatos, que el 10 de abril se haría una ceremonia donde nos incorporarían. Nos habló de otras cosas que no entendí mucho, pero que espero entender más adelante. Cuando dijo que haríamos juegos y paseos Gonzalo dio un grito de alegría y el profesor casi..., yo creo..., lo retó, porque lo miró fijamente y no le dijo nada.
Viernes 17 de marzo
Por fin, terminar la última hora, Pedro, nuestro profesor nos entregó la carta. La hojeé... Son tres páginas. Sonó la campana y con la carta en la mano no dejé de correr uno, hasta que llegué donde estaba mi mamá conversando con la mamá de José Ignacio. Le dije: "La carta de los lobatos", y se la puse frente a los ojos. "¿Me dejarás?" pregunté. Me dijo que tenía que leerla primero y conversarla con el papá.
Viernes 23 de marzo
Hoy al desayuno mis papás me contaron que fueron a la reunión con los Akelas, así deberé nombrar a los jefes de los lobatos. Me contaron que les mostraron diapositivas de diversas actividades de la Manada, luego les contaron qué es el lobatismo y las exigencias... Me dijeron que estaban más tranquilos y que me dejarían ser lobato, aunque les daba susto que durmiera fuera de la casa, que saliera a paseos o campamentos, que yo era medio distraído y me podía pasar algo. Yo les dije que no se preocuparan..., que nos habían dicho que nunca había pasado nada y yo les prometí ser obediente a Akela. Mi mamá se sonrió y me abrazó.
Viernes 10 de abril
Estoy escribiendo de noche, pues acabo de comer luego de llegar de la ceremonia en que nos incorporaron como lobeznos. Me dio risa porque "lobezno" significa un lobo niño. Y lo seré hasta que haga mi promesa. Y para eso tienen que pasar tres meses como mínimo. Esta tarde, cuando llegamos al Colegio, no sabía qué hacer. Varios compañeros de quinto, vestidos con uniforme scout, me preguntaban si iba a ser lobato. Me preguntaban que en qué manada y en qué seisena quería quedar. No sé. Claro que si lo pienso bien me gustaría quedar en la Verde, porque allí está un chiquillo que es amigo mío y que además vive cerca de mi casa. Pero Pedro nos ha insistido que serán él y Roberto los dos Akelas que tomarán la decisión.
Cuando llegamos al patio chico todos los uniformados hicieron un círculo. Roberto, el otro Akela, se dirigió a nosotros y nos dijo que miráramos muy bien lo que iba a pasar y que escucháramos todo lo que se dijera. Yo estaba muy contento, pero nervioso. No hallaba el momento en que nos llamaran. Pero Roberto, con voz bien fuerte, fue contando la historia de un niño llamado Mowgli que fue criado por una familia de lobos. Luego explicó que para que cazáramos mejor (esto para decir la verdad no lo entendí) nos agrupábamos en seisenas, que cada seisena era dirigida por un seisenero. Nombró de a uno los seiseneros y les entregó un palo forrado con pieles y cueros que tenían un banderín del color de la seisena y un libro forrado con piel donde se anota la historia de la seisena.
(En este momento tengo que suspender mi diario porque entró mi mamá a mi pieza y me dijo que era hora de acostarme, y como ahora que soy lobato tengo que ser obediente, claro que no se me olvide nada).
Sábado 11 de abril
Me desperté temprano y me senté en la cama a escribir. No se escuchaba ningún ruido en la casa. ¡Continúo el relato! A ver, me quedé en..., ah, ya... Akela Pedro le pidió a los seiseneros y segundos que nos llevaran al centro... A mí me dio susto, pensé que nos iban a pegar... Akela Roberto siguió con la historia de Mowgli. Los más grandes nos miraron bien, las orejas, la boca, nos daban vueltas y nos tomaban el olor (¡Qué lata!, nosotros habíamos estado jugando a la pelota). Después nos dio risa. Luego todo se ordenó. Luego nos fueron llamando en grupos de tres o cuatro, siendo recibidos por los seiseneros. Cada vez que nombraban a alguien yo quería escuchar mi nombre, estaba nervioso y como que se me apretaba "la guata", pero cuando me nombraron ni me moví. El "pelao" Sergio, que estaba a mi lado, me dio un codazo y me dijo: " a ti..., te llamaron". Entonces vine a reaccionar. Sólo cuando estuve en la seisena miré el báculo y me di cuenta que había quedado en la roja. Me gustó porque el seisenero es Juan Cristóbal, que es bien divertido y buen amigo... Además es bueno para la pelota.
Viernes 17 de abril
Hoy vengo muy contento a reunión, porque tengo mi pañuelo rojo. La verdad es que mi mamá, que vio algo de la ceremonia, se entusiasmó y llamó a las mamás de mis compañeros de la seisena y se pusieron de acuerdo; ella compró la tela y la mamá de Gustavo hizo los cuatro pañuelos de los nuevos. Claro que el Juan Cristóbal y el segundo, Álvaro, tienen además uno negro. Akela nos contó que ese era el pañuelo de grupo y que lo recibía el que hacía la promesa. Nos dijo que sí nos tenía una sorpresa y de una caja sacó gorros para cada uno de los que entramos este año, también nos entregó la insignia del grupo que se pone en el brazo de la camisa, y también el manual de los lobatos donde sale lo que tendremos que aprender.
Hicimos otros juegos y repetimos algunos de los que aprendimos en la reunión anterior.
7 de mayo
Han pasado varias reuniones y las encuentro interesantes. Hemos aprendido nuevos juegos, algunos nudos, algunas claves. Me dio una gran alegría cuando Bagheera me dijo que mi nudo estaba perfecto. Akela nos dijo que también el próximo sábado tendremos un paseo por el día al Parque Intercomunal, que tenemos que llevar pic-nic y harto entusiasmo.
Domingo 16 de mayo
Ayer nos juntamos a las 9:30 en la puerta del Parque, entrando por Bilbao. Yo llegué como 5 minutos antes, pero a la hora puntual tocaron formación y le dijimos al Akela: "Vámonos al tiro". El dijo: por ser nuestro primer paseo vamos a esperar 5 minutos, mientras pasamos lista y hacemos un gran clamor. Le pidió al seisenero verde que pasara a dirigirlo pues era la única seisena que estaba completa. Raimundo, un flaco, rubio con pecas, pasó adelante, se puso en cuclillas. Nosotros hicimos lo mismo. Él gritó: "¡Akelaaaaa! Y nosotros gritamos: "Nosotros queremos ser siempre mejor". Él gritó: "¿Hacer siempre lo mejor?". Se escuchó lindo el grito y unas personas que no tenían nada que ver se pasaron a mirar.
Luego caminamos por dentro del parque hasta un bosquecito y allí nos instalamos. Hicimos varios juegos en el lugar. Luego el Akela nos dijo que nos iba a enseñar a hacer el Consejo de la Roca. Y este consistía en que nos reunimos por seisenas y vimos cómo estaba cada uno cumpliendo la Ley de la Manada, además teníamos que hacer un proyecto de juego para las otras reuniones. Luego volvimos a la reunión general y el seisenero dio cuenta de los proyectos.
En seguida, cada seisenero "amononó", como dice Akela, un lugar para almorzar y se procedió a sacar las exquisiteces que los papás nos habían dado para el pic-nic. Yo le cambié al Pablo unas galletas que no me gustaban mucho por un sándwich con harto queso y jamón. Estaba exquisito.
En la tarde tuvimos un juego de pistas. Ganó la verde y nosotros salimos segundos por cinco puntos.
Viernes 28 de mayo
En esta reunión el Akela nos contó que en 15 días más tendremos el primer campamento, que es una noche y nos quedaremos aquí en el Colegio. Nos dijo que dormiríamos dentro de la casa y que no nos asustáramos por los ruidos de se escuchaban. Diego, el más chico de nuestra manada, le preguntó si era cierto que había murciélagos y el Akela, muy serio dijo que sí. No sé si creerle o no. Me entusiasma, pero me da un poco de susto, ¿y si los murciélagos son vampiros?
Domingo 14 de junio
¡No eran vampiros! Ni siquiera vimos a los murciélagos. Llegué al Colegio como a las siete de la tarde. Claro que la reunión estaba citada a las ocho.
Cuando tocaron a formación y después del Gran Clamor, Akela despidió cortésmente a los papás, que como que tenían ganas de quedarse con nosotros. Luego fuimos al comedor para la cena. Enseguida arreglamos los sacos de dormir y nos abrigamos para ir a la Velada. Yo no sabía lo que era, pero nos enseñaron a amarrarnos el pañuelo en la cabeza como los antiguos piratas. Luego fuimos al salón, porque hacía mucho frío, y allí cantamos, hicimos aplausos, danzamos y hasta pudimos hacer unos sketch. Cerca de la medianoche nos fuimos a acostar. Nos pidieron no comer nada dentro del saco, pues en el campamento, en carpa, se meten las hormigas buscando los pedacitos de comida que se nos caen y nos pican. Akela nos dice siempre que la disciplina nos ayuda a evitar problemas. Había varios lobatos con ganas de revolverla, pero Akela y los asistentes se quedaron con nosotros un rato y nos contaron que en menos de veinte minutos todos estaban durmiendo. Al día siguiente nos despertaron a las ocho. Tuvimos que salir en pijama al baño, pero nos lavamos rápido y luego nos vestimos, mientras los asistentes preparaban el desayuno. A las nueve estábamos tomando una rica leche calentita.
Tras arreglar nuestras mochilas las amontonamos en una sala, y salimos a una plaza cercana donde hicimos entretenidos juegos. Volvimos a mediodía a almorzar. Una pareja de asistentes se quedó preparándolo. Nos dieron ensalada de repollo. No me gusta mucho, pero me la comí de todas maneras. Enseguida tallarines con una hamburguesa. Hasta allí todo iba bien, porque todo estaba rico, pero le pusieron una salsa con unas callampas que no me gustaron nada. Luego, de postre, "tutti-futti" con crema. Hmm, exquisito.
En la tarde hubo un torneo de "ping-ball", que consiste en jugar igual que el fútbol, pero en una mesa de pimpón soplando una pelotita del mismo juego. Aquí sí que ganamos nosotros y segundos los azules.
Viernes 4 de septiembre
Hoy fue un gran día para mí, pues llegó el momento que Akela me había prometido: el día de mi Promesa. Me hubiese encantado ver la cara de mis compañeros cuando Akela me llamó y me preguntó si quería hacer la promesa, si conocía la Ley, el Lema, las máximas y la Promesa. Yo, sonriente pero con el corazón latiendo fuerte, como si se quisiera salir por la boca, le dije que sí. Me pidió que fuera a buscar a mis papás. Y tomando el tótem que tenía agarrado Bagheera, y haciendo el saludo lobato la dije sin titubear: "Akela, prometo hacer siempre lo mejor, para servir a Dios, mi Patria y mis padres, cumplir la Ley de la Manada y hacer una buena acción cada día". Akela, sonriendo, me saludó y luego saludó a mis padres. Yo saludé a los viejos lobos y luego a mi seisena, quien gritó en mi honor: "¡Rojos con valentía, a ganar la cacería!"
Viernes 8 de octubre
Akela me ha felicitado hoy delante de la Manada y me ha dado la insignia de lobato Saltador. Destacó mi espíritu de colaboración durante la preparación de la Fiesta Aniversario de nuestro Colegio, donde los scouts tienen a su cargo la Kermesse. Dijo que si seguía participando como lo había hecho hasta ahora, podría obtener mi insignia de lobato diestro al regreso del Campamento de Verano o a comienzos del próximo año. Que me esforzara.
Sábado 30 de octubre
Hoy durante la mañana tuvimos un juego de ciudad en torno al Colegio. Era la primera vez en que salíamos solos a la calle. El juego consistía en que éramos navegantes del Siglo XVI y debíamos tratar de volver al Colegio, que era América, para buscar la ciudad de "El Dorado". Claro que nosotros no lo sabíamos, sino que partiendo de diferentes plazas y siguiendo instrucciones y mapas debíamos seguir un recorrido.
Al final los grises, que tuvieron más fortuna lograron entrar primeros al Colegio y descubrir el plano que conducía al tesoro. En todo caso no debíamos correr y debíamos cruzar en las esquinas. Todo lo cumplimos bien.
Viernes 10 de enero
Estoy en cama. No había vuelto a escribir, pues me había hecho tantas ilusiones sobre el campamento de verano y no pude ir. Me enfermé y el doctor me dejó diez días en cama. Pero hoy vinieron Juan Cristóbal, Álvaro, Gonzalo y Diego y me contaron lo hermoso que había sido el juego nocturno, el baño en el río, la Flor Roja, y que las comidas habían estado excelentes. Esta vez Akela no le puso callampas a los tallarines. Me hicieron reír harto y se me pasó la pena. Me trajeron una piedra, una flor seca y un grabado en madera como regalos. Akela me mandó saludos y me dice que no me preocupe, que el próximo año será diferente. Claro, pero ya no podré ser seisenero. Bueno, qué se le va a hacer.
Viernes 27 de marzo
Hoy hemos vivido un momento emotivo. Era la Ceremonia de Paso, en que los mayores dejan la Manada para ir a formar los Rangers. Se fue Juan Cristóbal y Álvaro. Los echaremos de menos, pero ahora el Akela debe decidir quiénes serán los seiseneros. Lo anunciará en la próxima reunión, donde como el año pasado se integrarán los chicos de cuarto. En mi seisena quedo yo, Boris y Alejandro. Yo creo que estamos muy parejos con Boris. Claro que él fue al Campamento de Verano. Seguramente lo nombrarán a él.
Viernes 3 de abril
Se hizo la Ceremonia de Incorporación de los lobeznos. Antes de ello Akela empezó a nombrar los seiseneros y segundos. Los primeros nombres eran lógicos. Todos sabíamos que nombrarían a Gonzalo en la Azul, a Fernando en la Gris, a Rodrigo en la Verde, a Juan José en la Café y quedaba la Roja y la Naranja. Akela dice: "En la roja, después de darle muchas vueltas nos hemos decidido por Boris, a quien pido que pase para recibir..." No alcancé a escuchar más... me dieron ganas de llorar... Pero no lloré... Bueno, si lo nombraron a él, Akela tendrá sus razones -traté de convencerme-. "Y en la Naranja... Sí, el... (Akela fingía consultar un papel), sí, tiene méritos de sobra ¿no es así Balloo?... Promesado..., lobato saltador... Sí, Juan, te invito a pasar para recibir el báculo y el Talí de tu seisena". En ese momento no creía lo que había escuchado... ¿sería posible? Y Akela me llamaba... Ahora pienso que el Akela tiene la razón si me niega algo, pero seguramente eso es para nuestro bien.
Viernes 10 de abril
Se cumplió el plazo para tres saltadores. Gonzalo, Boris y yo recibimos la insignia de Diestros. Tuvimos que demostrar lo aprendido frente a la Manada y colaboramos en la instrucción de los primeros nudos con los más pequeños. ¡Me siento todo un viejo lobo! (Aquí nos saltamos varios meses del Diario de Juan para llegar al Campamento de Grupo).
Jueves 4 de septiembre
Aquí estoy escribiendo en un momento libre tras la once. En un fundo cerca de Melipilla, junto a un estero de aguas transparentes. Ya hemos instalado las carpas de los lobatos, la de Intendencia y las de los asistentes y Akela. Un grupo está trabajando en la cocina y otros en el hoyo de desperdicios y un tercer grupo lo hace en el W.C. Se ve bonito el lugar, aunque aún hay muchas cosas que hacer por todos lados, Lobeznos desordenados que tienen sus cosas repartidas por todos lados. ¡Claro... es su primer campamento en carpa!
Viernes 5 de septiembre
Ayer tras la comida nos fuimos derechito al saco de dormir. Con el viaje y el trabajo de armar campamento estábamos cansados. Nos levantamos a las 8 y tras un poco de ejercicio nos fuimos a lavar al estero. Tomamos desayuno y se hizo inspección. Se ordenó el campamento. En un plazo enorme nos juntamos todos. Más de doscientos. Allí se cantó, se hizo aplausos y gritos. Cada Jefe de Unidad dio cuenta de cómo estaba su grupo. Fue bonito.
En la noche tuvimos una pequeña velada con fuego. En torno a él cantamos y danzamos. Seleccionamos los mejores sketchs. Tenemos que presentar uno en el fogón de grupo.
Sábado 6 de septiembre
Hoy ha sido el día del grupo. Tras el desayuno nos reunimos todos en la explanada. Se hizo la Ceremonia de Colores, que consistía en izar las banderas de las unidades scouts de nuestro grupo y la bandera chilena. Luego cuenta de jefes. Gritos y aplausos.
Como a las diez y media, comenzamos a subir una pequeña colina en cuya cima se haría la Misa para la cual nuestro capellán llegó en ese momento. Fue impresionante. Especialmente para nosotros, los lobatos de quinto, que el próximo mes haremos nuestra Primera Comunión. Los espinos que nos rodeaban y estaban floridos daban un marco muy bonito. Desde la altura podíamos ver nuestras carpas pequeñitas como de juguetes. Tras la Misa volvimos al campamento donde tuvimos un rato de descanso.
Después del almuerzo se realizó el juego de grupo donde nos dividieron en pueblos bárbaros y debíamos tomar Roma que estaba en la cima de la colina, defendida por los Ardillas. Al final ganaron los Ostrogodos. Nosotros con los Búhos, Apaches, Leopardos y Panteras éramos los Vándalos.
Lunes 9 de septiembre
La verdad es que ayer domingo no pude escribir. Fue un día con harta actividad en la unidad, pero en la noche tuvimos que caminar a oscuras hasta llegar al lugar donde se realizaría el gran Fogón de grupo. Había que caminar en silencio (y con lo que me cuesta quedarme callado...) y con el pañuelo amarrado en la cabeza como si fuéramos piratas. Ya aprendí a amarrarlo para que quede bien y no se suelte. Después llegamos a un lugar en que al comienzo no veíamos nada pero luego comenzamos a ver algunas sombras que se deslizaban en uno y otro lugar. De repente un fuego aparece en lo alto y luego otro y otro y otro. Frente a nosotros hay un cerro que se ha llenado de luces que son antorchas sostenidas por indios.
Los indios, que son los Ardillas, bajan del cerro y con carreras y gritos encienden el montón de leño y una gran llama alumbra la noche y un rico colorcito nos invade. Luego vienen las danzas, cantos y sketchs. El nuestro fue bien aplaudido.
Nos hicieron levantar a las 7:30 porque debíamos desarmar el campamento. Un camión retirará las carpas antes del mediodía. Los buses partirán a las 12.
Cuando llegamos al Colegio los papás nos estaban esperando. Mi mamá estaba contenta y emocionada.
Martes 13 de octubre
Hoy me levanté tarde, pues ayer tuvimos la Kermesse y tuvimos que participar como Manada. Teníamos que construir un stand. El tema era el Mundo del Futuro. Nuestra Manada hizo un stand bien "loco" con forma de nave espacial. Debimos atenderlo por turno. Luego, en la noche, el fogón nos entusiasmó a todos. Terminamos cerca de la medianoche. Estábamos muertos de cansados.
Viernes 23 de octubre
Cuando llegué a la reunión, el Akela me pidió que dirigiera el Gran Clamor. Yo no entendí por qué, pero me puso muy contento. Cuando iba a volver a mi puesto el Akela me detuvo y anunció a la Manada que estaba muy contento de poder entregarme la insignia de Cazador. Yo me sorprendí, aunque tenía muchas ganas y había entregado el Manual para que me reconocieran la etapa.
Sábado 7 de noviembre
Esta es mi penúltima actividad en la Manada: el Juego de Ciudad en el Centro. Nos ha dicho Akela que tenemos que demostrar que conocemos el Centro de Santiago. Nos juntamos en la Plaza de Armas y debimos recorrer los alrededores de la plaza, buscando datos históricos. Luego el Barrio Cívico con el Palacio de la Moneda y los Ministerios, recorrimos la Alameda con el Cerro Santa Lucía y las Universidades. Nunca me había imaginado que había tantas cosas interesantes en el centro de la ciudad.
Nos sentimos muy felices cuando al llegar a la Fuente Alemana del Parque Forestal el Akela nos dijo que éramos los primeros. Los grises llegaron últimos. Ahora sólo me queda el Campamento de Verano, ojalá no me pase lo mismo que el año pasado.
Domingo 10 de enero
Después de haber descansado estoy escribiendo acerca del Campamento de Verano. Esta vez no me enfermé y pude ir. Claro que me costó un poco porque era mi campamento más largo: me acordé de mi familia, de la comodidad, la rica comida, los juegos y mi hermano chico, pero me acostumbré y lo pasé muy bien. Me daba mucha risa que cuando íbamos al río, Rodrigo, un lobato chico y flaquito de cuarto, como no se veía el fondo, me decía que tenía miedo que en el fondo hubieran sanguijuelas. Me acuerdo del momento en que me tocó ayudar a cocinar unas lentejas y cuando estábamos en el almuerzo, el Akela me miraba sonriente cada vez que alguien decía que estaban ricas. También me acuerdo cuando hicimos el Juego Nocturno y, para que "Kaa" no me pillara, me atreví a tirarme entre las plantas sin fijarme si habían espinas. De todas maneras me alumbró y perdí una vida. Pero la parte más emocionante fue cuando con el Akela y los asistentes subimos a las once de la noche a una pequeña colina y allí, en la cumbre, nos hicieron la despedida. Cada uno de los que dejábamos la manada habló y se despidió. Al final casi todos estábamos llorando. Luego debíamos volver al campamento, pues al día siguiente nos quedaba sólo desarmar y tomar las micros de regreso al Colegio y de allí a casa.
El próximo año tenemos que entregar el báculo y el talí y pasaremos a Rangers.
RANGERS
Viernes 3 de abril
Son las seis de la tarde. Recorro los patios de mi Colegio. Estoy impaciente. Se acerca la "Ceremonia de Paso": dejaré la Manada de lobatos y pasaré a pertenecer a la Tropa Rangers.
Escuché pensativo al Akela, me puse triste, pero una vez que me despedí y que pasé la barrera puesta en el patio, cuando llegué al Grupo Rangers, tomé fuerzas y me sentí más optimista.
Viernes 10 de abril
Con mucho deseo esperaba las tres de la tarde. A esa hora debía estar en la Capilla del Colegio. Cinco compañeros de curso estaban también allí. Llegó el Viejo Rangers y sus asistentes. Era la "Operación Secreta", donde, en medio de una Liturgia, aceptábamos ser Jefes de Patrulla. Después conformamos nuestras patrullas.
Me sentí acogido por el Viejo Rangers y los asistentes. ¡Ya gritaba de felicidad!
Lunes 13 de abril
La tropa se presentó en pleno en la Capilla. Son las ocho y treinta de la mañana. Celebramos la "Ceremonia del Cambio de Mando". Los nuevos Jefes de Patrulla recibimos los signos de manos de los jefes del año anterior. Rezamos, cantamos y leímos la Palabra de Dios. Me sentí feliz de recibir esta responsabilidad, ser Jefe de Patrulla, aunque en un primer momento pensé que no iba a ser aceptado tan fácilmente por mis nuevos compañeros de la patrulla, pero estos sentimientos fueron desapareciendo al pensar que el Colegio depositaba mucha confianza en mí.
Viernes 24 de abril
Fue nuestra primera T.F. como Rangers. La actividad consistía en el "Trabajo de los Signos". Cada patrulla se reunió para arreglar o confeccionar su báculo, bandera, talí, escudo.
Me sentí contento trabajando y compartiendo con mi patrulla. Me sentí orgulloso de ser Ranger.
Viernes 8 de mayo
Hoy fue nuestra segunda T.F. Realizamos varios juegos y evaluamos los trabajos de la T.F. anterior.
Luego nuestros jefes mayores nos llamaron para que presentáramos nuestros talís, báculos, banderas, escudos y cuadernos de progresión personal. Cada Jefe de Patrulla debía también presentar su libreta de "J.P.". Se nos dio un puntaje por patrulla.
Sábado 9 de mayo
La Tropa se juntó al pie del Cerro San Cristóbal. Fue nuestro primer paseo. Subimos a pie, entre cantos y conversaciones, nos tocó un día hermoso. Llegamos junto a la Virgen donde rezamos a María y contemplamos los diferentes sectores de Santiago.
En este, mi "Primer Paseo Ranger", me sentí feliz de aportar y darle fuerza a mi patrulla. Mi patrulla me brindó mucha amistad. Aprendí la danza del "Re-Se-Se". Aprendimos un canto simpático llamado el "Tuchi". Antes de bajar a la explanada, cada patrulla presentó un número de expresión. Fue nuestra primera velada en los Rangers. También aprendimos a jugar con pañolines.
Viernes 15 de mayo
Realizamos nuestra tercera T.F. Trabajamos en la temática de la "Imagen Plástica". Consistió en que cada patrulla presentaba las actividades ya realizadas a través de dibujos y recortes. Fue muy entretenida.
Ese día, el Viejo Ranger nos dio una sorpresa: cada ranger recibió un gorro con los colores negro y rojo, colores símbolos de nuestra tropa.
Sábado 6 de junio
Ese fue un gran día. La Iglesia celebró la fiesta de Pentecostés, la venida del Espíritu Santo. Los Rangers la celebramos con la "Olimpiada de Pentecostés". Es tradición de todos los años. La preparamos con entusiasmo. Comenzamos celebrando una Liturgia en nuestra Capilla. La celebración de la Luz y de la Palabra. Pedimos la fuerza del Espíritu Santo. Me gustó por la fuerza de sus símbolos.
Más tarde se encendió la antorcha olímpica y comenzaron nuestros juegos, pruebas atléticas, deportes y obras de expresión.
Fue un día lleno de alegría.
Viernes 12 de Junio
Llegó el día de presentar nuestro "Trabajo Académico". Durante dos semanas, en clases de Historia, nos preparamos para presentar cada patrulla el tema la "Línea de tiempo de la historia". Investigamos en Biblioteca, dibujamos, recortamos. El día de la exposición cada integrante presentó en patrulla el tema. Al presentar mi parte me puse nervioso, luego me solté y pude enfrentarme al curso sin temor. Gané en confianza y me di cuenta que yo sabía lo que decía al curso.
Viernes 28, sábado 29, domingo 30 de junio
Era nuestro primer campamento en la Tropa Rangers. "El Campamento de Invierno".
Dormimos bajo techo, pero todas nuestras actividades las realizamos a campo abierto. Sólo podíamos entrar a la casa para dormir en la noche.
Aprendí a cocinar, a prender fuego, a levantar una mesa. Tuve que aprender a escuchar la instrucción de los jefes sobre cómo se hacía cada comida.
Me costó prender el fuego bien hecho y se me pegaron los tallarines.
No fue fácil ir a levantar los platos o las ollas, pero con esfuerzo logré vencerme.
Aprendí a cocinar arroz, atún, sopa, puré y los tradicionales tallarines sin callampas.
Sábado 7 al miércoles 11 septiembre
¡Una nueva experiencia! Otro tipo de campamento: fue el "Campamento de Grupo".
Me perfeccioné en las comidas y aprendí a levantar una carpa junto a mis compañeros de patrulla.
Hubo algunos momentos en que estaba todo el grupo: Colores, Misa, Gran juego, Gran Fogón. Cada unidad scout presentó un aspecto de la "Edad Media".
Me gustó que lleváramos disfraces relacionados con el tema de la historia, cuyos personajes habían sido investigados por cada uno de nosotros. Yo participé en el fogón de grupo representando a Francisco de Asís.
Viernes 27 de septiembre
Todavía recuerdo aquellos lindos momentos vividos en el campamento de grupo.
Hoy realizamos una nueva T.F. para secar las carpas que llegaron húmedas del campamento y para ordenar nuestro material.
Ahora estoy en mi casa. Me acosté. Estoy solo en mi dormitorio y me puse a reflexionar.
"Mi labor como jefe de Patrulla". He vivido una experiencia "grossa".
Ha sido un gran paso en mi corta vida scout que me ha tocado vivir. Me ha hecho ser más responsable e mí mismo, de mis compañeros de patrulla y de mi Tropa.
Al principio me preguntaba cómo podía yo responder al cargo que se me encomendaba siendo yo de la misma edad que mis compañeros. Me preguntaba: ¿me harán caso?, ¿me escucharán? Creo que he logrado adquirir confianza gracias a que mis jefes siempre me respaldaron y gracias a mi patrulla, que a pesar de las dificultades ha sabido salir adelante en los proyectos que nos hemos propuesto.
En un tiempo tuve dificultades serias con un patrullero que no respondía como debía, pero como toda persona, se recuperó. Me costaba decirle que estaba equivocado, pero conversando con él logramos que entendiera y nos llevamos muy bien.
Lunes 30 de septiembre
Estoy por completar mis "Progresiones de Cernícalo, Aguilucho y Gavilán".
Me tuve que esforzar bastante, ya que es un aprendizaje difícil. Nunca se me olvidarán, ya que ellas me permitieron un crecimiento personal y una esperanza de entrar a la Tropa Notre Dame des Bois.
A través de las progresiones de Rangers pude conocer más la historia de mi Colegio, pude aprender a conocer más la Biblia, aprender cantos y danzas. Gracias a las progresiones pude saber más de la vida de Jesús. Gracias a las progresiones pude conocer algunos árboles.
Aprendí a conocerme más a mí mismo y aprendí a servir al prójimo y a progresar en mis estudios. También aprendí a servir mejor en mi familia.
Viernes 4 de octubre
Hoy es el día del patrono de los lobatos, San Francisco de Asís. Los J.P. fuimos a saludar a los lobatos y al Akela. El viejo Ranger nos hizo reflexionar en clase de Orientación sobre el sentido de la "Ley, el Lema y la Oración" de los Rangers.
La Ley, el Lema y la Oración Rangers significan para mí tener un espíritu de Fraternidad y Lealtad.
Yo pienso que decir "siempre la verdad" y vivirlo en todo momento no es fácil. Reconocer que tú lo hiciste mal es difícil. Hay que denunciarse uno mismo. Cuando juego me cuesta reconocer que el otro tiene la razón, es difícil actuar con lealtad.
En la tarde de este viernes nos juntamos para preparar juegos, proyectos de "Stands" para la Kermesse y ensayar nuestra obra. Es la fiesta aniversario del Colegio que hay que preparar.
Viernes 11 de octubre
Hoy montamos nuestro stand, es una Mezquita Árabe. Al lado de ésta armamos un camello, cuyas jorobas debían recibir una pelota lanzada desde afuera.
Sábado 12 de octubre
¡Gran Kermesse! Nos preocupamos cada patrulla de atender nuestro Stand, lo hicimos por turno.
Al atardecer cada unidad presentó su obra. Nosotros presentamos "Francisco y el Sultán". Me sentí feliz de presentar a los papás y a la comunidad nuestra obra.
Viernes 8 de noviembre
Para mí y algunos compañeros fue un día especial, pues pedimos a nuestros jefes que fuese aceptado nuestro "Compromiso Ranger". La respuesta nos la darán en el Campamento de Verano. Hay que esperar.
Viernes 3 de enero
Llegó el día esperado. Salimos a campamento, ¡nuestro último campamento como Rangers!
Junto al río armamos nuestras carpas en el bosque. Allí realizamos nuestros últimos juegos y fogones, nuestras últimas culpas de patrulla.
No olvidaré aquella "Liturgia" en el día 6 de enero. Rezamos y escuchamos la Palabra del Evangelio. Como era el día en que los Reyes Magos visitan a Jesús, nos hicimos cada uno un regalo construido con elementos sacados de la misma naturaleza.
En los "Fogones" me sentí feliz porque pude desarrollar mis dotes de actor, canté con hartas ganas. Los J.P. dimos cuenta de cómo había sido para cada patrulla el campamento, cada día. Este campamento fue más exigente para nosotros. Tuvimos que hacer "Construcciones" mejor terminadas. Cada patrulla construyó una mesa y una cocina sobre superficie.
También construimos un puente sobre el estero.
El "Rincón de Patrulla" junto a la carpa teníamos que dejarlo siempre limpio.
Progresamos en nuestras "comidas".
Aprendí a cocinar algo nuevo croquetas de salmón. Me costó hacer las primeras, pues les ponía poca harina y otras veces les ponía demasiada.
¡Al fin aprendimos a realizar bien nuestras "Culpas de Patrulla"! Fueron momentos de más silencio donde todos pudimos escuchamos y ayudamos a superar nuestros problemas.
Al principio yo pensaba que mis problemas eran sólo míos y que no debía contarlos, pero a poco me fui convenciendo que podía contar con mi patrulla. Es bueno contar con los demás en los problemas propios, porque esto ayuda y para eso están los amigos.
Quiero contar especialmente lo que pasó el martes 7 de enero:
Eran las seis de la mañana. ¡Nos despiertan más temprano! ¿Qué sucede? ¿Qué pasa?
"Salgan de la carpa, tranquilos", nos dicen nuestros jefes. Pero ¿qué pasa?
Nos explican: "Tomen una caja de leche, mermelada y pan".
¡Es el SAFARI!
Nos entregaron un mapa con algunas instrucciones. "Recorran el lugar señalado, tomen tacto con la gente y respondan a las preguntas indicadas en este papel".
Cada patrulla recibe instrucciones distintas.
Debíamos volver a la hora del almuerzo con la tarea realizada.
Fue una linda experiencia. Conocí cómo era la gente del campo, en qué trabajaban; cómo se sacaba la miel de abejas, cómo se hacía el carbón, cómo se confeccionaba un mapa y recorrer caminos sin equivocarse.
Aprendí mucho de la gente del lugar. Saben recibir al que llega y le ofrecen pan y frutas.
Miércoles 8 de enero
Un día esperado, como los lobatos y los Scouts de las Tropas grandes hacen su promesa, nosotros los Rangers realizamos nuestro "Compromiso".
Junto al mástil, nuestros jefes llamaron adelante a algunos de nosotros que habíamos sido aceptados.
Cuando yo pronuncié mi Compromiso sentí una tremenda alegría. Fue un gran paso en mi vida scout.
Me comprometí, "con la ayuda Dios a decir siempre la verdad, para crecer respetando a los demás. Vivir en esfuerzo y alegría; cuidar la naturaleza y cumplir la Ley Rangers".
A las nueve de la noche vivimos nuestro último fogón.
El silencio en medio del campo y las estrellas como que me invitaban a recordar tantas aventuras vividas.
Sentí una tremenda emoción junto a ese fuego que nos regalaba su calor. El Viejo Ranger nos dijo que sobre esos leños había que echa momentos de aprendizaje y nuevos gestos de amistad para que en el futuro ese fuego se consumiera. Nos llamó a seguir viviendo nuestra aventura scout, que en los próximos años sería de más exigencia y mayor compromiso, pues debíamos crecer.
Nuevamente me puse triste, como aquella vez en que salí de los lobatos, pero como me sucedió también esa vez, el optimismo volvió a mí cuando, tomados de las manos y confiados en el "mejor amigo de los Rangers", cantamos:
"Quédate conmigo, oh Jesús, que empieza el día a morir. Quédate conmigo, oh Jesús, y en tu pecho hazme dormir."
15 de marzo
Germán me preguntó por qué quería ser scout.
Yo me puse medio nervioso de no saber qué contestar a eso. Pero las respuestas verdaderas son las no preparadas...
Le respondí:
Cuando era chico, quería ser scout porque vi mucha aventura en ellos. Hoy me doy cuenta que tiene algo más. Se aprende de la naturaleza, no de la tecnología.
Tenemos que descubrirnos nosotros mismos, y aprendernos. Un error se puede superar. El scout ayuda, el scout respeta los defectos. Esas cosas me gustan y me siento como lo que quiero ser. Quizás pierda en juegos, pero habrá otra oportunidad más. En el scoutismo uno aprende lo que la naturaleza nos muestra. La enseñanza es como un tesoro que contiene pura luz. El scout te da la llave, y te da más de muchos otros tesoros, pero hay que encontrarlos. Otra que me gusta, es que todos trabajamos, no hay un rey ni nada. Todos hacen lo que pueden hacer los demás.
CEREMONIA DE PASO A TROPA DE N.D. DES BOIS
28 de marzo
Hoy es viernes, un día en el cual yo he progresado en mi vida scout en el Colegio. He pasado de los Rangers a la Tropa Notre Dome des Bois. Los chiquillos se fueron separando en grupos, le tocó al mío; yo me sentí muy nervioso y veía las caras de los jefes de octavo y me decía a mí mismo: "Me gustaría con éste, con aquel no". Cuando me lo designaron quedé muy contento por la gente que me había tocado en mi patrulla. Eran: Matías, el jefe; Andrés, el sub; Manuel, Juan Pablo, Gonzalo, L. Felipe, Javier y yo.
Luego nos reunimos y Matías nos invitó a que dijéramos cómo éramos; luego nos habló de la bitácora que era un grueso cuaderno que escribirá cada scout acerca de su vida de aventuras y de aprendizajes. Yo, personalmente, me sentí muy acogido.
Finalmente, Germán y Mauro nos saludaron e invitaron a vivir la aventura scout...
17 de abril
Llegué del Colegio a mi casa feliz, mostrando a todo el mundo la CARTA CONVOCATORIA al primer "week-end" de la Tropa des Bois que se realizaría en El Quisco.
Me dirigí velozmente a mi pieza, armando un gran alboroto; extraje mi mochila del closet. Allí estaba ella ansiosa por ser ocupada, con todos sus compartimientos vacíos. ¡Manos a la obra!, calzoncillos, pantalones, ropa anfibia, todo, y mientras los objetos van ocupando los espacios, pienso en el campamento..., estas zapatillas de repuesto..., son importantes, ¿y si me caigo al agua? Tomo el "contrabando" con ansias de comerlo ahí mismo y pensando cuánto le tendría que dar a los demás.
Mi mamá entró y quiso revisarla para agregar chalecos y abrigos..., me miró y comprendió que un tropero des Bois ya no es un niño a quien se le hace su mochila. El la hace. Me dio un beso.
Viernes 23 de abril
En Construcción...